Además, algunos apostadores participan en la lotería para satisfacer su curiosidad, ya que esperan experimentar de primera mano cómo funciona este popular juego. Más a menudo, crece en ellos y se convierten en jugadores habituales. Esto también los impulsa a investigar las loterías accesibles para ellos y mantenerse informados sobre las tendencias recientes para asegurarse de que finalmente las disfruten.
La lotería está arraigada en la cultura de juego peruana, y los apostadores aquí han estado apostando por muchos años. Hace décadas, la colección de juegos de lotería disponibles era un poco pequeña. Pero los amantes de este juego todavía estaban increíblemente entusiasmados por jugarlos cuando tenían la oportunidad.
Al ver cuán apasionados eran los apostadores por la lotería y otros juegos de casino, el gobierno decidió desarrollar un sistema legal integral para proteger a los jugadores y proveedores, de modo que estos últimos no se aprovecharan de los primeros. Y todas las actividades de lotería podrían regirse por la ley. El primer paso para lograrlo fue legalizar las apuestas en 1979, ya que podría hacer que el proceso de concesión de licencias fuera más sencillo.
Vale la pena señalar que en aquel entonces, la mayoría de los fanáticos de los juegos de azar apostarían en la lotería sin conexión. Internet o la tecnología no eran tan avanzadas, además, solo unas pocas personas sabían lo básico sobre cómo navegar por los limitados sitios de lotería disponibles.